El término PANK (tías, profesionales, sin hijos) fue acuñado por Melanie Notkin, una canadiense especialista en marketing. Esta tía abnegada, soltera, se hizo famosa en 2008, cuando fundó el sitio www.savvyauntie.com (algo así como tía con destreza), con contenidos dedicados a las tías modernas, sobre regalos y salidas con sobrinos.
Tal fue la repercusión que tuvo la Web que hasta se creó el Día Nacional de la Tía en Estados Unidos (se festeja cada 28 de julio). Según este sitio ya hay 23 millones de PANK en el mundo que gastan unos 9 mil millones de dólares en sus sobrinos, por lo cual expertos en marketing ya analizan este nicho inexplorado de mujeres que pueden invertir en regalos, ropa, salidas y viajes.
En Tucumán, las agencias de viaje y las jugueterías son testigos directos del fenómeno PANK. “Las vemos entrar a diario con los sobrinos. Nunca hay escándalos; lo que ellos quieren las tías se los compran. Y cuando se acerca el Día del Niño, Navidad y Reyes Magos suelen hacer grandes gastos”, detalla Rosario Palma, encargada de una juguetería de la Peatonal Muñecas.
“Tenemos muchos casos de tías que salen de vacaciones con los sobrinos o les hacen de regalo de cumpleaños de 15 a la sobrina un viaje a Disney, para las dos”, cuenta Julián Delgado, de una agencia de viajes.
“En la investigación que hicimos sobre las tías PANK de Argentina nos llamó la atención el gran potencial económico que tienen estas mujeres profesionales. Es un sector todavía muy poco explorado por el Marketing”, advierte Alejandra Fuentes Cuiñas, del Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE).